Por veces hacerse el loco y escuchar una historia miles de veces es simplemente genial,
aun cuando ambos sabemos que ya esta dicho,
que no hay nada más por agregar aun así yo quería seguir escuchando,
aun ahora quiero escucharte,
aun ahora quiero que descargues tus memorias pasadas en mi.
Que gastes tu saliva maravillandome una vez más,
que desgarres tus vocales hasta su limite solo para una leve sonrisa pintada,
solo por la persona que quieres,
solo por mi, solo para mi y nadie más...
Pero no se puede ¿no?
No, no, no ya no dices nada,
frialdad de tu lado y un vago recuerdo...
de como tu sonido se reproducía en la pequeña caja en que vivíamos,
fragmentos vacíos e incoloros,
deteriorados hasta el polvo.
Se fue y ya no volverán esas tardes escuchando,
esas sonrisas tuyas,
esas lagrimas se secaron ya ¿no?
No, no, no la tuyas si y las mías...
¿Serán las tuyas también?
Sera que... No, no, no... Ya no volverás...
Ni en el recuerdo quedaras,
esa es la ley para que puedas volver debes de olvidar quien fuiste,
retorna cuando puedas,
como un brote calmo o como una célula rebelde...
O si lo prefieres,
como versos míos, solo míos, solo para mi y yo para ti...
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