La muñeca perdida 4/~

Oh es que haz decidido muy bien, espera déjame que me pare y te aplauda por tan brillante idea que haz tenido... Un momento ¿Cómo se supone que me aplauda a mi misma? -¿Eres idiota? ¡Es fácil!- Agh, nadie te pregunto a ti -Total que ni quería decirte, mejor sigue caminando- ¿Y qué crees que hago? -Pues hablar contigo misma, idiota- ¡No me digas idiota! ¡Aquel que dice idiotas a los demás es un idiota! ¿Comprendes. idiota? -¡Como digas!-

Bueno, bueno... Quizá te preguntes: "¿Pero qué...?" y yo diré: "¡SO, QUESO!" ¿Comprendes? Es un juego de palabra, como el pasapalabra y de nuevo me desvíe del tema ¿no?

En fin, todo esto ocurrió una tarde que regresaba de camino de sacar unas fotocopias, traía mi maleta llena de ellas y estaba muy cansada, ya estaba oscureciendo, pero aun se vislumbraba un bello atardecer que adornaba muy bien esas calles amplias que existen en el lugar en donde vivo que desde el autobús hacían ver todo con un ambiente cálido y seguro, quizá por eso me fui por ese lado... Ese lado que al adentrarme en el era muy oscuro y solitario, el sol rápidamente desapareció en el denso ramerio que se hacia con tanto árbol que había o bueno, así fue como me lo parecía a mi...

Mientras más avanzaba menos segura me sentía y una extraña sensación invadía mi cuerpo, al grado que aun ahora al recordarlo volteo a ver hacia a tras, sintiéndome insegura de dejar mi espalda libre, teniendo que moverme a la cama y pegarme a la pared para poder continuar escribiendo, quizá sea una miedosa, pero no me agradaría nada volvérmela a encontrar ¿A quién? Pues a esa muñeca que vagaba por ese mismo camino, sí ella andaba por si sola...

Veras, en algún momento escuche paso y fue entonces que voltee a ver muy preocupada y llena de miedo, esa fue mi perdición  esa muñeca tan fina, tan bella, tan irresistible y tan macabra estaba ahí  quieta, esperando a que llegara a verla siendo guiada por mi curiosidad y, efectivamente así fue. Lentamente me acerque a ella, porque ya de por si lograba sentir un escalofrió recorrer mi piel ya que sentía que esos ojos azules penetraban por mi alma e intentaba poseerla ¿Puedes creerlo? No estaba tan lejos de la verdad... Pero ella solo me miraba quieta, sabiendo que su presa llegaría a su red y una vez que estuve cerca vi como sus ojos se movían de un lado hacia otro, examinando mi ser: "No estas tan mal -dijo con una voz muy escalofriante mientras yo me mantenía congelada del miedo- Tu alma luce bien, tu cuerpo... Bueno no he tenido suerte con el -"Oh pero que amable de tu parte decirme fea, muñeca maldita"- Pero existe algo en ti que si se puede usar y hasta explotarlo, ¿Sabes qué es? Son tus sueños, sueñas mucho y yo me alimento de eso~"

Eso era más de lo que necesitaba saber, no sé muy bien como, pero sentí un fuerte impulso por correr, aun así mi cuerpo estaba preso del miedo mientras que esa muñeca se seguía acercando a mi lentamente...  "'¡NO! ¡DEBES ESCAPAR!"... ¿Quién fue esa persona que lo dijo? No lo sé, lo que sí sé es que esa voz masculina pero fina y delicada como unos bellos pincelados que resonaba en mi cabeza me había hecho reaccionar y en menos de lo que esperaba ya estaba corriendo, escapando, huyendo a mi refugio, mi casa.

Al llegar ahí me encerré en mi cuarto y al tiempo se me fue el miedo, sentía como la calidez de mi cuarto me acogía y me brindaba una armoniosa calma y como esa voz amable aun rondaba en mi mente haciéndome sentir con unas urgencias de dormir...

Soñé con él, era bello, hermoso, era espectacular, todo una obra de arte con gran porte y él me cuidaba, cobija y arrullaba como a una niña pequeña para que me olvidara de todo lo que había pasado ese día y así fue, lo olvide...

Hasta hoy, ¿Por qué lo recordé? Porque la volví a ver: "Esta vez no corras ¿Quieres? Ah y por favor, no llames a ese estúpido amante que tienes, es una molestia si quiero poseer tu alma, como sea, apresúrate y entrégame tu cuerpo"... Esta vez la patee lejos, ¿Cómo se atreve a decirle estúpido a mi aman---? ¿PERO QUÉ...?

-So~ Queso -dijo una voz casi susurrada en mi cuarto, sí en el mismo en el que estoy escribiendo ahora mismo- Vaya que eres una molestia, hacerme venir hasta tu casa para poseerte... Por cierto, voy por ti que lees esto, por ahora solo sueña~ Tus sueños serán la vía que me lleven a ti~

-PFFFFFF, eso no asusta a nadie, muñeca tonta

-¿Crees qué me importa? Igual y ya te poseí, pequeña...

-Agh, menudo lio ¿Cómo se supone que lea yaoi ahora?

-Soy fujioshi(?)

-¡Haberlo dicho antes! Entonces, por favor se gentil~

-Las personas de ahora ya no son las de antes... Así que, bienvenido al club de las posesiones~