“En un suspiro, así fue como partió mi querido abuelo… Antes de dejarme en este abismo”
-Hija, apresúrate –decía una voz maternal luego de tocar con amabilidad a mi puerta- Cariño, debes apurarte a ir a la escuela – abrió la puerta de mi cuarto de par en par y luego se acerco a donde yo aun reposaba entre los brazos de Morfeo- Hija mía, es hora de despertar –su dulce voz sonó de nuevo para luego acariciar mi mejilla- Vamos, despierta, despierta… -esa voz, ¿Por qué se va apagando? Madre, ¿Por qué suenas así?-
-¡DESPIERTA!
–La voz, esa voz no era la de mi madre ¿En donde se había ido mi madre? Desperté sudando y llena de nerviosismo, mire a mi alrededor y recordé- Los muertos no hablan… -dije para mí para luego reír con demencia- ¡Si, así es, los muertos no hablan! ¡¡JAJAJAJA!! –me arqueaba de la risa con mi mirada perdida y una risa desolada y demente que simplemente se cayó al contemplar su soledad para finalmente tumbar su cuerpo en esas sabanas rojas- Ah, es verdad… Estoy sola –se hizo a un lado y vio como una sombra se proyectaba en la pared- Así que has regresado –su tono de voz era ahora retador, ¿Cómo no lo había visto antes?- Pues bien, no importa si me matas –se sentó con el cabello cubriendo su cara y escondiendo su sonrisa- Ya no hay nadie a quien le importe, después de todo ya los has matado…
-…. –hubo un silencio sepulcral por unos minutos mientras la chica seguía con la cabeza baja para cubrir su rostro demacrado con su propio cabello- Aun hay alguien –Esa voz, esa odiosa voz resonó por todo el lugar una y otra vez, ¿Cómo puede decir tal tontería?- Apresúrate y vístete, el juego está por comenzar y no te lo querrías perder ¿no niñata?
-¡Pfff! –vocifere con fuerza- Es claro que no, después de todo si gano podre matarlos a todos ustedes –Me levante de la cama y alce mi mirada, unos ojos rojos me miraban fijamente y con su mano me indicaba donde estaba mi ropa- Para la próxima, toma una forma menos grotesca “mamá”
-Eh~ -su voz de nuevo había cambiado ¿Qué era ahora? ¿Acaso la de una mujer “juguetona”? Luego de eso soltó su habitual carcajada- Linda, para la próxima tomare la forma que desees
-Entonces toma la forma que realmente tienes para que pueda saber a que me enfrento –le miraba seria, pero aun así “ella” hozo con pasar sus brazos por mi cuello y susurrarme al oído-
-No puedo, el juego no debe terminar así~ -fue lo que dijo para luego darme un beso en la mejilla y desaparecer dejando como recuerdo un leve “despierta”-
-Claro, “mamá” –reí apretando con fuerza mi puño- Ya desperté –me apresure a cambiarme y ponerme mi habitual traje de pelea- Solo espero que esta vez me deje ir contra “eso”
“Eso” era la cosa que había despedazado brutalmente a mi familia, una por una fue cayendo a su merced mientras sus miembros eran removidos y lo que quedaba de sus cuerpos convulsionaban por tanta sangre, “eso” también fue lo que me dejo vivir diciendo que aun no debía morir, que debía de seguir en este juego grotesco de la ruleta rusa y volverme fuerte para ser un manjar a la hora de tragarme, estaba asustada por tal demostración que había hecho ante mis ojos y como no si aun tenía unos inocentes 5 años, desde entonces ya han pasado 10 y yo aun sigo encerrada en este mundo volviéndome mas y mas fuerte, pensando ¿hasta cuando seré lo suficientemente fuerte para ser un “manjar” y trate de venir a por mí? Pero aun entre tanta basura encontré personas a las cuales llamar “amigos” aun así, ese no era mi destino pues cada amigo que hacía era asesinado. Una y otra vez observe con impotencia el terrible acto de este circo cruel al que llamamos vida y en esta onda brecha de completa oscuridad mis lagrimas se perdieron para siempre y fueron sustituidas por esta sonrisa de oreja a oreja que adorna mi rostro, una risa tan macabra que por siempre me acompañaría.
-Tsk, esta tontería aun no me manda con “eso” –dije al ver cuál era mi próxima víctima, maldije todo internamente para luego respirar profundo- El show, está por comenzar y tu mi victima serás –dije a un son armonioso mientras se escuchaba un sonido que indicaba que la pelea debía comenzar, rápidamente me abalance contra ese indefenso ser y con una guadaña le corte en dos dejando que la sangre me cubriera, pero eso no era suficiente, no aun debía seguir o todos se aburrirían y nunca sería enviada a luchar con mi objetivo- Ara ara~ tal parece que aun estas vivo –como es de esperarse en este mundo lleno de sádicas criaturas, la muerte solo se te puede ser concebida cuando cada célula de tu cuerpo ya no de signos de poder seguir adelante, de ser solido, debes pasar a liquido completamente o mejor aun ser el festín de todos estos sujetos monstruoso que con sus ojos nos miran en nuestra danza a muerte- Pues bien –me di la vuelta con gracia para luego patear los sesos de ese ser- Déjame librarte de tu dolor –Y claro, si son sádicos es más que claro que aun teniendo una parte separa de ti la puedas sentir aun en la más remota distancia- ¡Anda, grita con todas tus fuerzas y llena a estos tipos de placer! –Todos, todos y cada uno gritaban de alegría y euforia al escuchar tan magníficos gritos provenientes de esa garganta desgarrada, sonaban tan melodiosos que incluso yo disfrute el matarlo lentamente, convirtiéndole en una abominación- La cena está servida –hice una breve reverencia y me fui alejando a pasos lentos mientras todos los presentes se tiraban sobre esa plasta que aun emitía sus gritos ahora para nada armoniosos-
-Eres una engreída – ¿el otra vez?- Para ser una chica tan linda estas más que manchada de sangre, Ekatherine –antes de que siguiera lo detuve tirándolo contra la pared de los vestidores del coliseo-
-¿Qué quieres, Henry? –le miraba con odio y repulsión ¿Cómo una escoria como esta se atrevía a llamarme por mi nombre?- Te he dicho que no me llames así, ahora todos me llaman Fénix ¿entiendes? Debes llamarme así si no quieres morir
-No digas tonterías, pollito en llamas –su mirada retadora me asqueo y le solté para luego abofetearlo- Eh~ niña insolente, sé que no me harías nada porque deseas demasiado enfrentarte a “eso” y si rompes las reglas solo deben hacer una cosa, matarte sin reglas
Reglas, reglas y mas reglas, como las odiaba, pero era lo que me mantenía con vida, al principio era un asco en este “deporte” adoptado así que mil veces estuve cerca de morir, de ahí que me llamen Fénix… Pero lo que importa aquí son las reglas, estas consisten en cosas simples como la principal y esa es que: “Todos los alimentos están muertos, pero sus conciencias los mantienen vivos dentro de sus sueños, por ello deben soñar siempre, si no lo hacen morirán” La clave para soñar en medio de tanta demencia es soñar con darle muerte a lo que nos tiene aquí y esa es la segunda regla: “Siempre debes soñar con matar a “eso” porque de esta forma aseguras que vivirás” y la tercera y la que más me cabrea es: “Las peleas son siempre dentro del plato del invitado y ustedes los alimentos no deben pelearse fuera, pues no es bueno jugar con la comida”
Así es, nosotros somos los alimentos e incluso tú que lees esto podrías ser uno de ellos ¿Cómo? Sencillo, solo necesitas dormir y ya eres un plato disponible para todas estas masas deformes que disfrutan sentarse en familia y ver como su comida lucha por sobrevivir mientras les brindan un espectáculo tan placentero como grotesco, pero tranquilo una vez tomen tu mente serás capaz de ver la belleza del show y pues ¿qué mas decir? ¡Que el mejor manjar gane!
Por ello, estas cordialmente invitado a este banquete de seres vivientes y que no se te olvide algo, es mejor que sepas bailar bien el vals, pues esta fiesta está por comenzar, ahora, duerme y sueña, ven a mi parque de diversiones, que yo y “eso” esperamos tu llegada con ansias.
-Anda que eres idiota –un golpe atestado con furia me saco de mis pensamientos- Deja de soñar despierta Ekatherine y dame ya mi dinero
- C-Claro, no se preocupe –sonríe por el hecho de saber cuál sería mi victima ahora, le di su dinero y se marcho- Así que, “El abismo me consume y las drogas me dominan” –reí con un tono de locura y luego relamí mis labios- Serás una delicia de manjar y así como esta chica, tu cuerpo me pertenecerá –“No te pertenezco, yo seré quien te mate, ya lo veras”- ¡Eso, eso, sigue soñando y dejándome la realidad a mí para poder alimentarme de todas estas mentes frescamente podridas que adornan este mundo tan contaminado!
-Eres una abominación cuando estás en ese cuerpo –sus brazos rodearon mi cuello nuevamente- Eres muy peligroso, señor “eso”
-Para estar muerta hablas demasiado, Emi –guarde por un tiempo silencio y luego añadí- Que me digas abominación mientras tú eres la que me creo y enseño este magnífico poder es algo irónico ¿sabes? Ya que de no ser por ti no podría dominar los sueños de las personas y encerrarlas en mi mundo de ilusiones, todo te lo debo a ti
-Pero aun así me mataste, eres malo ¿sabes?
-Oh, no digas eso, devoré tu alma, tu mente y tú ser, así que tú vives dentro de mi
-Lo hiciste por poder y por poder ella te matara
-Pero aunque lo haga, ella solo tomara el lugar de su abuelo y la tradición seguirá, para que tú puedas revivir nuevamente y sigas creando mas descendencia y así llenar este mundo de “eso” –reí un tanto sonoro- Seria muy interesante verlo, pero estas hambrienta ¿no? Por eso ahora solo soy un recuerdo mas –mis fuerzas no daban para mas haciendo que yo terminara cediendo y es que la comida está muerta y solo puede luchar dentro del plato, pero no puede luchar con el comensal- Adiós, Emilia –exhale mi última bocanada de aire y partí, dejando a mi nieta encerrada en ese abismo, para que naciera y pasara por esto una y otra vez-
-Bienvenida a casa, Ekatherine –con sus manos frías como el hielo toco su vientre el cual se iba inflando dejando espacio al feto que nacería mientras que ella recobraba su cuerpo- ¿El abuelo fue bueno contigo? ¿Te entreno como debía? ¿Crees poder derrotarme ahora? Aunque ¿sabes? Es una lástima, pero yo soy “eso” y ¿Cómo derrotaras a algo que no está presente? ¿Qué existe fuera de tu alcance? Hija mía, no puedes, así que deja de soñar y despierta, despierta
-¡DESPIERTA!
Esta ruleta rusa nunca terminara, pero ¿Qué se supone que haré? “Con mis uñas desgarre su garganta y su último aliento fue mío, luego su ser fue devoraron por esas criaturas, una vez mas renací como el Fénix que soy”
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